Hoy hemos traído a Edurne a la sección de entrevistas del Blog de MeitaiMatiei.
Edurne Maiz Aldalur es tolosarra, Diplomada en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad de Navarra, Licenciada en Psicología por la Universidad del País Vasco (EHU/UPV), y recién doctorada en esta última universidad tras defender su tesis doctoral sobre la neofobia alimentaria infanto-juvenil.
Como siempre, a nuestras entrevistas solo traemos a personas con las que hayamos tenido alguna relación, y…yo conozco a Edurne desde que éramos pequeñas, más concretamente del parque de Zabalarreta de Tolosa. Hace unas semanas pude conocer su trabajo a través de Euskadi Irratia, y aquí la tenemos, tras proponerle que venga a visitarnos y ¡aceptarlo!
Bueno, Edurne, ¿qué estás haciendo ahora? Hemos oído que has defendido una tesis en la Facultad de Psicología de Donostia sobre la neofobia alimentaria en niños/as y adolescentes.
Sí, así es Gloria. Me dedico a la investigación y mi interés se centra en la psicología de la alimentación, esto es, la importancia que tienen las emociones y los pensamientos a la hora de alimentarnos. Consecuencia de ello ha sido la defensa de la tesis.
Eres Diplomada en Nutrición Humana y Dietética. ¿Cómo te decidiste a sumergirte en este mundo? ¿y en el tema de la tesis?
Tras terminar la carrera estuve unos años trabajando como dietista y en aquel momento me di cuenta que decir qué se tenía que comer, no era suficiente. De hecho, las personas que llevaban toda una vida haciendo dieta, en sí, sabían perfectamente cómo debía ser una alimentación saludable, y aún y todo, no eran capaces de bajar de peso y mantenerlo. Aquel hecho repetido causó curiosidad en mí y por eso pensé en estudiar psicología. Tras terminar la carrera me animé a investigar…queriendo dar respuesta a aquello que había vivido unos años atrás en la consulta. Empecé con la obesidad infantil y entre diversas variables de estudio, se me ocurrió incluir la neofobia alimentaria. A lo largo de la investigación hemos observado que es una variable con más peso de lo que creíamos, y por ello, hemos mostrado los resultados a la sociedad.
Y ¿qué es, concretamente, la neofobia alimentaria?
Lo cierto es que en español no existe un término concreto para estos/as niños/as. Se ha traducido como niños/as “quisquillosos/as o caprichosos/as” respecto a la comida. Son aquellos/as niños/as que rechazan probar nuevos alimentos. La neofobia es muy común en el proceso del desarrollo infantil, pero si sigue a partir de una cierta edad, puede llegar incluso a darse en la edad adulta. En la tesis, aparte de la alimentación, hemos estudiado variables psicológicas de los/las participantes, y hemos podido observar, que los/las niños/as y adolescentes neofóbicos/as presentan niveles más altos de ansiedad y menores puntuaciones en autoestima. Por ello, hay que trabajar para que la neofobia no pase de ser un problemilla a un verdadero problema, sobre todo, en casa.
Además, la neofobia alimentaria ha tenido su razón de ser en la evolución humana. Los seres humanos, en tanto que omnívoros, tenemos la opción de ingerir una gran variedad de alimentos. No obstante, frente a esa diversidad, antaño, antes de probar un nuevo alimento debíamos ser cautelosos y tener miedo, debido a que el alimento podría ser venenoso o tóxico.